26 sept 2010

Vuelo




Había una vez una pluma, el ave de donde se desprendió no importa porque la pluma por sí misma generó un ave nueva, el misterio reside en que esa ave era totalmente desconocida para la ciencia de entonces, un niño la encontró y la cuidó. Cuando llegaron a estudiarla la enjaularon y el ave desapareció, pero quedó la pluma. El niño cogió la pluma y la puso en su frente, de ahí nació la misma ave... El niño anda por la vida con el ave, ésta le prometió alas, él le prometió amor.

1 comentario:

JustmysteriouS dijo...

...Quiero una ave, quiero volar, quiero sentir...