30 ene 2011

Sendero



Me preguntaba el porqué del sendero que dejaste a tu paso.
Huellas luminosas, huellas sombreadas.

Un pie sobre tu luz y ésta se apagó. Un pie sobre tu sombra y ésta se volvió un gigante insaciable que se comió las calles adoquinadas y espantó a los faroles, que volaron como luciérnagas, hacia la Luna:

El refugio de los románticos;
sean hombres, sean Soles, sean flores...

17 ene 2011

Alerta



"Emotional landscapes,
They puzzle me,
Then the riddle gets solved,
And you push me up to this
*
State of emergency,
How beautiful to be,
State of emergency,
Is where I want to be".


Se activa una sensación de alerta ante la falta de estímulo que se ejerce sobre la nave nodriza sanguínea. Las venas mecánicas se vuelven cada vez más estrechas y las dermoluces reducen su intensidad. A media luz los ojos se cierran pues ya no son útiles y las bocas se secan pues ya no hablan, porque ya no son escuchadas. En la penumbra nadie escucha.

La sensación de alerta despierta a los guerreros blancos, que no son más que cobardes cazadores montados en cobras de acero. Se arrastran los reptiles con la presión del pecado sobre sus escamas en busca de pieles exóticas pues han dejado atrás las suyas y el Sol se ha encargado de volverlas polvo. Despiertos los cazadores, ansiosas las presas pues ahora son deseadas. En la temporada de caza nadie duerme.

La sensación de alerta conduce a cimas nevadas; allí toda flama se vuelve una chispa y toda chispa regresa a su origen porque no hay oxígeno que la alimente ni viento que la perturbe. En las montañas que rozan los cielos nadie hace fogatas.

Como cuando el rosal impone un toque de queda y los pétalos resignados vuelven a sus capullos para no ser arrancados. Así la sensación de alerta que provoca la involución de los cuerpos; un flash back hacia el último punto de restauración, justo antes de que se desate todo.

La sensación de alerta: la insectificación del sentimiento, el reflejo inmediato ante el peligro y, por tanto, el miedo a la extinción del mismo sentimiento.



14 ene 2011

No vuelvas



"No vuelvas a ofrecer tu corazón en charolas de plata que la Luna es celosa con sus entrañas", me lo dije anoche entre sueño y sueño.

Pero corazón es todo lo que puedo ofrecer a alguien de carne y hueso.


"El que fue pastor y ahora es oveja"




Texto incluido en el evento "Cisticerco Decembrino" del grupo artístico "El Gran Guiñol" en Enero de 2011.



No es culpa suya que su cuerpo haya sido clonado de manera despiadada con máquinas hechas de fe falsa. Tampoco es culpa nuestra que nos hayan dado uno a cada quien, como robots que nacen para servir al humano cuando éste es el único esclavo.

¿Y qué haces con la carne momificada de alguien que ahora es sólo un recuerdo? La conservas en la habitación, como un mueble más, vistoso pero sin anhelos.O si prefieres puedes conservarla en alcohol y hielo para comerla cuando estés exhausto y hambriento después de cumplir con tus horas de perverso, cuando tengas antojo de un pequeño refrigerio. Cuando no tengas más alimento que tu propia carne, que no se compra con dinero sino con sexo. Entonces su sangre coagula, sus costras cada vez más fuertes y duras, gestadas del gigante Orgullo que tropezó huyendo del diluvio.

Todos dicen amarlo mientras colocan un clavo más en sus pies y manos, para que no se vaya, pues temen que la soledad posea sus almas y que éstas se conviertan ene putas baratas, como si hubiesen olvidado que ya lo fueron en el pasado; así que hay que decirles: "no os preocupéis hermanos, sus almas son las perfectas damas de compañía para el Villano, son sucias, enfermas, hipócritas, pero ¡ah qué bien sincronizan la lengua con sus labios!".

¿Por qué no crean una fragancia? Los diseñadores de todo el mundo entraría en pánico con ese olor a maderas roídas, metales oxidados y la más pútrida carne humana. Que se rocíen con ella los "Elegidos" al banquete del Señor, el perfume radiactivo impregnará huesos, piel, se filtrará por todos los rincones del cuerpo hasta llegar al corazón: corazón flameante, corazón cobarde, corazón ardido. Sería la sensación entre los clérigos, se arrancarían las vestimentas finamente ornamentadas para conseguirlo, un afrodisiaco para su orgía litúrgica, y un pretexto para pecar en el sentido tan torcido que tienen acerca de lo prohibido.

Si reencarnara, y en la nueva carne consciente de sus genes antigüos, de su pan y su vino, de sus amantes y discípulos. Si paseara sus sandalias por el frío concreto extrañaría el calor de la arena que alguna vez quemó sus puños. "¿Por qué celebran mi Natalicio?..." se preguntaría sorprendido, "si soy el más ausente, de mí mismo, moribundo mendigo". Y para sanar el maleficio de esas penas corta-venas se tiraría a cada uno de los vicios: más alcohol para el Mesías, hasta que se tornen rosadas esas mejillas; más marihuana para el Mesías, hasta que escriba con su propia pluma su surreal biografía; más sexo para el Mesías, hasta que se le pueda culpar a Él como principal difusor del SIDA... y así, más y más, que se vuelva un autómata consumista como todos querrían.

Le han arrebatado su divinidad y en su lugar dejaron superstición y temor. Pero quien teme es Él, somos el objeto de sus miedos. Sus palabras son disfrazadas, su imagen ridiculizada; se ha vuelto el Santa Claus sangrante, austero y miserable. Pobre hombre al que le rogamos por compasión y no le ofrecemos más que saliva y sudor.

No es culpa suya que su cuerpo haya sido profanado por hombres avaros. Tampoco es culpa nuestra que nos hayan quitado nuestro imaginario de serpientes con plumas, flores del campo, calaveras vengadoras y otros tantos ídolos paganos. No busquemos culpables, recordemos: alguna vez lo hizo un grupo de tiranos, con sus modernos artefactos torturaron hasta la muerte; así nosotros ahora pero peor, pasivamente.

Pero qué importa, que cada pecado siga siendo nuestro guía.

Cojamos, cojamos: debemos sobrepoblar este mundo y enfermar a la persona de al lado.
Durmamos, durmamos: "¿por qué yo?" que alguien más se haga cargo.
Comamos, comamos: hay que dejar limpios los huesos del pavo.
Odiemos, odiemos: más vale ser respetado (temido) que ser amado.
Deseemos, deseemos: "¡lo quiero! debe ser mío" gritamos desesperados.
Adquiramos, adquiramos: hay que llenar nuestros bolsillos con cada centavo.
Alabémonos, alabémonos: "Yo soy Dios y todos ustedes mis marionetas, insignificantes seres humanos".

Nació de un vientre rentado, de madre mustia y padre abnegado. Dicen que lo enviaron a salvarnos y posiblemente así fue, dicen que es el Hijo del Padre pero ¿no somos lo mismo nosotros? ¿acaso?

"AMAR-TEAMO-RIR"



Texto con el que colaboré en Septiembre del 2010 en el evento "Testicula Ocularum: Homenaje a Georges Bataille". del Grupo Artístico "El Gran Guiñol".


Historias de amor, mitos para dos. En donde la muerte es protagonista con su falo en mano, repartiendo el pecado, alimentándose de tú y yo. Escritas con sangre, sudor, lágrimas, saliva, semen; ideas muertas que recobran la vida que les arrebató la cordura. Una de ellas que se extiende por el pecho tibio y vibrante, tan pálido que la luna ya no le mira y de tal intensidad que el sol ha decidido no iluminarle más. Otra yace a lo largo de un muslo poderoso que se adjudica la victoria de otros. Una idea más que desborda con su esencia los límites de la psique, derramada en la espalda desnuda de aquel cuerpo mundano como si se tratase del líquido salvador que mata a la sequía; desde la nuca hasta la rabadilla descansa arrullada por el sonido que producen los fluidos cuando la fuente les libera.

¡Una guillotina para llevar por favor! ¿Incluye su propio verdugo? O tendré que hacerlo todo yo, pues estoy a punto de venirme en sus bocas…

Somos putas del idilio mal logrado, tan deseado desde las entrañas más rojas, más sucias, más vivas; entrañas que gritan pidiendo un simple orgasmo, un beso de despedida y un “hasta nunca” disfrazado de abrazo. Entonces volteamos al fuego del pasado y nos quema los ojos. Arden los corazones en las hogueras de los Dioses, qué mejor leña que las ilusiones de los mortales.

Su error fue coger con el miedo mientras cogía conmigo, y su cuerpo se convirtió en piedra mientras flácido volvía a ser su pito. Sus manos pasaron a ser hielos que no flotan, sumergidos en el más corriente de los vinos. Cuando los dedos de las manos no alcancen usemos los dedos ajenos, puños completos. Estemos dispuestos por garganta y recto a protestar contra las reglas del juego. Reglas creadas para romperles el cuello, someterlas y obligarlas a lamer ídolos.

¿A cuáles ojos lo miro? Pues los que más he visto, esos que besan la luz, que se abren y cierran, ellos me hablan de mundos sin guerras donde el amor y el sexo son hermanos gemelos no separados por hombres malvados, en esos ojos suyos me veía flotar entre cielos de flores y campos de estrellas. Pero cuando éstos se transformaron en cavernas incendiadas, oliendo a azufre y colonia barata, cuando los cielos cayeron y los campos se abrieron: flores secas y estrellas opacas, ahí supe que esos ojos suyos, esos que yo prefería mirar, nunca estuvieron en lo cierto, que mentían para poder pintar mi cuerpo de blanco con su pincel de hierro.

En cambio, esos otros ojos, los que besan la oscuridad, que cuelgan y lloran aprisionados en cárceles de algodón porque se les prohíbe la libertad debido a su instinto animal; esos péndulos que irónicamente no saben de tiempo ni respetan los cuerpos; esos que mueren con dientes de plata y de ésta otros objetos. Esos ojos suyos del haberno que causan calamidad entre bocas de ajenos, dejando su marca que no es un número ni un símbolo sino un recuerdo, de los más peligrosos, de los más bellos.

Esos otros ojos, vergüenza del Eterno, que tanto me buscan, que tanto intentan verme pero que alejo de repente por temor a perderme en ellos. Esos ojos suyos, los que parecen estar siempre relegados son los mismos que le guían por el mundo. Los que prefería no escuchar aunque en realidad nunca me mintieron, los que prefería no besar para no morir con su veneno.

Ahora los entiendo, su verdad de ojos, su verdad no absoluta, su verdad de sexo, cuidando y protegiendo la oscuridad, perforados, encadenados, vueltos esferas del Destino cubiertas de celos.

¿Coger con la bella mentira o coger con la horrible verdad?



13 ene 2011

Cuando los ojos




Cuando pongas tus ojos en blanco y se escurra el iris y la pupila por el caño...

Cuando uses esos ojos perfectamente simétricos como bolas de la fortuna de las viejas gitanas, malditas arpías...

Cuando eches a rodar esos ojos y caigan tan rápido que sólo vean pavimento al pasar...

Cuando los lances al viento y les crezcan alas, como las de los colibríes, y un pico para amamantarse de las nubes...

Cuando arrojes esos ojos al lago con la esperanza de que se formen ondas, se expandan y nunca lleguen a topar la orilla sino que la salten y sigan en expansión hasta el infinito, envolviendo Todo...

Cuando utilices esos ojos en un tablero de ajedrez y no sean ni la reina, ni el peón, ni el rey, cuando sean Dios que no puede manipular porque no tiene manos, que sólo está ahí observando cómo los jugadores se hacen entre ellos pedazos sin haber comenzado aún la partida....

Cuando arrulles a tus ojos como si se tratase de tus hijos y les cantes canciones de ritmos andinos...

Cuando uses tus ojos como bombillas y dejen de alumbrar porque ya no hay nadie que te guste...

Cuando no puedas utlizar tus ojos como separadores de libros porque son muy gordos inclusive para uno de Borges, uno que nunca escribió claro...

Cuando metas esos ojos tuyos al televisor y dejen de ver en tercera dimensión porque ya están en la cuarta, y cada que cambias de canal con el control remoto avanzan una dimensión y retroceden tres...

Cuando alimentes a los dinosaurios con tus ojos, haciéndolos polvo y dando una línea a cada brontosaurio para que la inhalen, como nosotros con la buena cocaína...

Cuando sazones la comida con tus ojos, que te quede exquisita y se la des a tu amante para que nunca se aleje de ti...

Cuando esos ojos tuyos se derritan bajo el rayo del Sol, porque el microondas ha dejado de servir pues su fuente de energía murió...

***
Cuando esos ojos tuyos y estos ojos míos se encuentren, después de tantos vestidos, después de tantos lugares, después de tantas vidas. Sólo entonces nuestros hijos tendrán un ojo en la nuca y uno en la frente. No para visualizar el pasado y el futuro respectivamente sino para crear un equilibrio entre los hijos del tiempo y nuestra especie.

11 ene 2011

Iluso



*
La ilusión es el medio, no el fin.
Pero es el medio sólo para llegar al camino:
ya entiendo por qué me perdí.
*

Sin voz(s)




No puedes hacer que el mudo hable, ni aunque le prestes tu lengua, ni aunque dibujes una puerta en forma de boca en su frente: donde las palabras viven, para que salgan y sean libres.

Seguramente son palabras que no deben salir, quizás por su fotofobia, o por la inseguridad que estamos viviendo. Nadie quiere ser secuestrado, pero no les importa enajenarse y sobrevivir como les sea posible en un cubo, en medio del caos. Así esas palabras.

Lo que sí puedes hacer es ir de boca en boca esperando escuchar lo que quieres escuchar, pero eso sería como escuchar el trinar de un ave en un reproductor portátil, una y otra vez: las veces que quieras pero jamás será lo que deseas.

O también puedes esperar a que se encuentre la cura para tan espantoso mal, pero puede que haya olvidado el lenguaje y no consiga decir otra cosa más que balbuceos e incoherencias...




10 ene 2011

Descanso

(No hay imagen)


El corazón también se cansa, no deja de ser un músculo. Pero no se cansa de latir pues para eso fue programado desde tiempos inmemorables. Se cansa de sentir.

Quiere descansar sobre una cama con sábanas hechas de rosas rojas, pero lo único rojo en la inmensidad de la cama es él y las únicas rosas a su alrededor están repletas de espinas venenosas.

Tiene sueño pero sabe que no puede dormir, por eso es que siempre ha soñado despierto y cada sueño en vigilia aumenta las probabilidades de una caída, ya sea porque se imagina en la orilla de un barranco o porque se imagina volando y de repente le cortan las alas.

Quien insista en que se siente con la cabeza, en efecto sentirá de esa manera pues habrá confirmado que no tiene corazón, y si lo tiene, lo habrá condenado al sueño eterno, donde no hay fantasía, ni terror, ni mucho menos implicaciones inconscientes de cualquier tipo, en ese estado onírico hay nada. Se podría decir que es una especie de limbo, un portal infinito entre un campo y otro del cual jamás se encontrará extremo.

No hay peor corazón que aquel que no quiere sentir...

6 ene 2011

Espera, del verbo Espiral.




Cada palabra que salía de su boca era un caracol. Cogí cada uno de ellos y escuché las distintas notas que el mar puede alcanzar. Escuché sirenas y tritones. Sopranos y tenores.

*
Soprano de cuerpo salado, te escurres en mis oídos,
Sirena del Presente, nada hacia el arrecife donde te espero cada luna.

Tenor de labios dulces, me besas con tu canto.
Tritón del Recuerdo, guíame con tu tridente de luz.

*

Esos caracoles jamás serán fósiles, los conservaré en mi buró para escuchar el mar cada vez que quiera recordar su voz.

4 ene 2011

Parpadea(me)




*
Viví detrás de una pupila dilatada,
queriendo ser libre en los campos del iris,
pero cuando la luz llegó me aprisionó más.

*

3 ene 2011

Celestial




***

Se sacrifican estrellas fugaces por amantes ignorantes de su amor.
Cuerpos estelares somos tú y yo.
Almas inmortales.

**

Tú y yo
Tuyo
Soy
Yo

*

Tú, ser mitológico


***
Por cada pregunta encontré una respuesta, muerta.

Caían como plaga bíblica, entes amorfos segregando plasma transparente. Yo no sabía y continúe preguntando hasta que una, cuyo cuerpo parecía el de un león enano y alado, cayó sobre mi hombro izquierdo, rebotando un par de veces hasta que terminó en el suelo, inerte.

Cuando distingues su forma es porque te pertenece.

La vi a través de la botella vacía de vino tinto que guardaba en mi mochila, pues esa botella era el único recuerdo que tenía de ti. Porque solamente a través de ese oscuro cristal verde se puede ver el verdadero color de su plasma.
Era tan bella inclusive muerta. Con su maravilloso porte, melena dorada y una sonrisa en su cara, alas perfectamente trazadas que me deslumbraron pues brillaban más que el propio Sol esa tarde de otoño.

Pequeña respuesta, ¿por qué no te conocí antes? Cuando volabas sin rumbo por el cielo violeta, esperando encontrar tu pregunta gemela y cargar sobre tu lomo al dueño de la boca que la dijera. No te advirtieron que las más bellas de tu clase tienen que ser sacrificadas porque valen más muertas que vivas, y que en otra vida, tú guiarías a tus hermanas hacia el vientre de tu madre.

Pero si dejo de preguntar, el cielo se sobre-poblará con respuestas y éstas a su vez se reproducirán sin conciencia, gestando quimeras malignas que después invadirán nuestro mundo para apoderarse de nuestro libre albedrío.

Como todo ciclo, como toda era.

A menos que las respuestas salgan volando de la cueva que tus labios sellan: sigo preguntando, sigo matando respuestas.

1 ene 2011

Sueña(me)





¿Por qué me das la espalda mientras duermes?
Sólo abrazo tus sueños, y en secreto, mudos anhelos.

A través de mis párpados también te veo.

Tentáculos de medusas que unen almas gemelas,
nos rodean como la hiedra, nos recorren de pies a cabeza.
Ya no volamos, ya no caminamos, ya no nadamos:

Flotamos.

Ya no hay vacío, ya no hay temor, ya no hay abismo:
Porque ya no hay gravedad.